¿CUÁL ES TU HUELLA?
Materiales:
- Vasos de cristal
- Celo
- Folios blancos
- Lápiz
- Cartulina negra
- Polvos de talco
- Crema de manos (opcional)
Agrupamiento:
Pequeños grupos de dos o tres niños y niñas
Procedimiento:
queremos comparar huellas dactilares para encontrar las nuestras propias entre las de los demás, entonces, para ello, dejaremos marcadas en un vaso de cristal nuestras huellas dactilares; para que queden mejor dichas huellas podemos untarnos primero las manos con crema y después agarrar el vaso. Una vez hecho esto, pasaremos a obtener nuestras propias huellas de la siguiente manera, cogemos un lápiz y con el grafito de la mina pintamos un trozo de folio, fijándonos en que este quede muy oscuro, después, pasaremos uno de nuestros dedos por la mancha de lápiz en el folio, apretaremos bien el dedo para que se manche bien e imprimimos las huellas sobre un folio (debajo de nuestra huella pondremos nuestro nombre para tenerla bien identificada).
El siguiente paso, sería esparcir polvos de talco sobre la superficie del vaso donde dejamos marcadas nuestras huellas, así, estas se verán mejor. A continuación, pegamos un trozo de cinta en la huella del vaso, despegamos, y la volvemos a pegar en la cartulina negra que habíamos preparado al principio de la actividad; de esta forma, identificaremos la huella mucho mejor.
Ahora solo queda la parte final, que sería comparar todas las huellas que tenemos, las del folio blanco, y las de la cartulina negra, para saber cuáles son las que nos pertenecen y cuáles son las que pertenecen a nuestros compañeros y compañeras.
CON UN OJO NO BASTA
Materiales:
- Un bolígrafo con su respectiva tapa por equipo
Agrupamiento:
Parejas
Procedimiento:
uno de los miembros de la pareja coge el bolígrafo y su tapa, uno de los objetos con cada mano, y los sostiene delante de sí, a 30 cm más o menos con los brazos medio flexionados (no extendidos del todo), mientras el otro/a miembro de la pareja le tapa uno de los ojos. Cuando tenga los ojos tapados este intentará colocar la tapa en el bolígrafo, pero lo más probable es que al primer intento no encajen. Acto seguido repetirán el proceso pero esta vez con ambos ojos abiertos (el otro componente de la pareja seguirá los mismos pasos después de su compañero/a), momento en el que seguramente si encajen ambas piezas.
A través de esta experiencia, los niños y niñas podrán deducir la importancia que tiene que poseamos dos ojos para poder calcular de la manera más exacta posible distancias, profundidades, medidas... lo que ayudará a valorar este sentido que poseen.
La vista
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